No importa el área profesional en la que te desarrolles, la creatividad es una habilidad que siempre va a ser apreciada por los jefes y que obviamente nos sirve en nuestra vida diaria, pero cuántas veces hemos contestado en voz baja: Yo no soy creativo.
Todos hemos estado en esa junta, donde nos dicen algo como “danos una propuesta creativa” y tú te quedas pensando “¿Pues qué quiere que invente?”.
Estoy de acuerdo que – o peor aún, a ver si se les olvida que nos lo habían pedido. Llegada la fecha de entrega ponemos alguna excusa o pretexto para justificar que no somos creativos.
Bueno, pues déjame decirte que para inventar pretextos o mentiras también se necesita creatividad. ¿Entonces, eres creativo o no?
Pero enfocándolo a la vida empresarial, ser creativo necesita tener una cierta estructura que no sabemos porque no la conocemos, porque no nos la enseñaron. Entonces, te comparto una herramienta que puede ayudar a estructurar tu creatividad.
Una de tantas herramientas de “lluvia de ideas” que hay es SCAMPER. Específicamente sirve para proponer nuevas formas de operar con el mundo que ya existe y cómo transformarlo a tu favor. Es la técnica que se utiliza para crear esos productos que luego nos venden como “nuevo y mejorado” … aunque siempre está la discusión de que, si es nuevo ¿cómo puede ser mejorado? y si es mejorado, ya existía, por lo tanto, no puede ser nuevo.
Basta de rollos:
SCAMPER es una mnemotecnia que se divide así:
- Substitute (Sustitir)
- Combine (combiner)
- Adapt (Adaptar)
- Modify (Modificar)
- Put to another use (Ponerlo en otro contexto / Darle otro uso)
- Eliminate (Eliminar)
- Reverse (Revertir/Voltear)
La herramienta funciona haciendo preguntas en cada uno de los pasos, no se vale brincarse ninguno.